lunes, 18 de mayo de 2009

Vivitos y coleando

Año impar, Real Unión y play-off de ascenso son términos que van intimamente unidos en los últimos siete años. Siete años de sinsabores, dos enormes y uno un poquito más pequeño, que han desembocado en esta temporada mágica del torneo copero y el campeonato del grupo I.

Sin embargo, todo esto es papel mojado a la hora de la verdad que tuvo su primer asalto el domingo en el Ramón de Carranza. Lo que no se puede negar es que este año el camino va a ser diferente: los fracasos anteriores vinieron precedidos de resultados favorables al principio. Por lo menos, este año no habrá excusa en ese sentido. Los chicos de Alonso se vieron envueltos en una maraña de juego brusco e incontrolado que no les iba ni mucho ni poco, con la connivencia de un colegiado hogareño al que no le dolieron prendas en dejar con dos jugadores menos al Real Unión, mientras que el Cádiz se fue de rositas.

Con todos estos condicionantes la derrota por la mínima es el mal menor, y lo único que parece claro es que la vuelta será un partido duro, habrá que ver si en todos los sentidos del término. Tanto Cádiz como Real Unión mostraron algunos defectos. A decir verdad, el Unión mostró más de los esperados, o al menos, los que no ha mostrado en todo el año: debilidad defensiva, falta de presencia en el medio campo, agresividad fuera de tiempo, ... Pero tampoco el equipo cadista dejó de enseñar algunos puntos flacos: en todas las jugadas a balón parado pareció que se podía hacer peligro.

Por lo tanto, semana para mentalizarse tanto equipo como afición. Ya no quedan entradas de asiento y Gal debe ser, a su manera, un hervidero. Seguramente será imposible recrear el ambiente de la Tacita de Plata dadas las características del público irundarra, pero si todos los actores ponen de su parte estamos en puertas de un domingo histórico, el del 24 de mayo de 2009 (por cierto, día en el que un servidor cumplirá un lustro exacto como Ingeniero de Teleco, esperemos que tengan a bien hacerme un pequeño regalito).

Aupa Unión!